Por Pedro Canché
Chunyaxché, municipio de Felipe Carrillo Puerto.- Jacinto Canul, comisariado ejidal de los ejidos Chunyaxché y anexos (9 aldeas mayas) se declara un aliado incondicional, junto con sus 604 compañeros ejidatarios, del presidente Andrés Manuel López Obrador para concluir el Aeropuerto Internacional que oficialmente se llamará “Felipe Carrillo Puerto” ( AIFCP)
Jacinto Canul pide a AMLO pedir permiso a la selva y que cumpla 25 puntos que darán desarrollo a los 9 pueblos de Chunyaxché y Anexos
Y están dispuestos a darles otras 100 hectáreas para la explotación de bancos de Sascab para el paso del tren maya y el Aeropuerto.
Este Aeropuerto está a 20 kilómetros de Tulum, en un predio de 1500 hectáreas por las cuales el Gobierno Federal pagó a 40 pesos el metro cuadrado al ejido Chunyaxché y Anexos y cada ejidatario recibió cerca de 700 mil pesos con lo que construyeron sus viviendas. Las casas pasaron de ser de madera a cemento, block y vitropiso.
Jacinto Canul a 4 kilómetros de la selva donde cruza la nueva carretera federal al nuevo Aeropuerto y el Tren Maya, acá habrá un Puente y otra en la carretera federal 307
Dedicados al cultivo del fruto del dragón, la pitaya, la cual envían por toneladas a Europa, ahora sus pueblos bordean un Mega proyecto.
Fue un primer empujón del gobierno de AMLO a la dignificación de la vida de 9 aldeas, Chunyaxché, Cecilio Chi, Chumpón, Chunhón, Chunyá, San Antonio Nuevo, Sajcabchen, Yodzonot chico y San Hipólito.
“Nos toca a los mayas el desarrollo”
“Le digo a los activistas que se oponen al Tren Maya y al Aeropuerto, que ahora nos toca a los mayas el desarrollo, ustedes lo tienen ya desde Tulum hasta Cancún con los miles de hoteles frente al mar”, dice. Su pueblo está organizado para defender el aeropuerto al que han hecho suyo: “es nuestro desarrollo”.
El líder maya atiende la petición del general Constantino, jefe de ingenieros que construyó el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, para recorrer la selva y dar ubicaciones por medidas tradicionales y ellos, el Ejército, con marcar con GPS las coordenadas.
Hay una carretera de 12 kilómetros en construcción, de 4 carriles, que comunica este Aeropuerto con la carretera federal 307 a 4 kilómetros de Chunyaxche, pueblo que tiene a Muyil, una hermosa Zona Arqueológica rodeada de canales de agua dulce que llegan al Mar Caribe.
Aluxes vs Soldados
Esta terracería de 12 kilómetros al Aeropuerto ya está siendo pavimentada con cemento. El dirigente maya Jacinto Canul es escoltado por soldados a los encuentros de trabajo con el general Constantino, quien sonríe efusivamente y se presenta: “Fui por la cartilla y me quedé por la tortilla”. Hay cientos de maquilarías entre tractores, volquetes, grúas y maquinaria pesada de construcción.
Es obra de seguridad nacional. Hay 200 soldados y 700 obreros de Chiapas y Tabasco. Los mayas no les gusta trabajar como obreros, prefieren sembrar pitaya y sus milpas. Los más jóvenes están trabajando en la hotelería de Tulum y Riviera Maya.
El líder Jacinto les recuerda a los soldados que no han hecho las ofrendas a los Señores de la Selva, que AMLO debería acordarse de esta ceremonia. Las piedras filosas rompen las enormes llantas de las maquinarias, los soldados tienen encuentros con la nauyaca, se cuidan de entrar en la selva. Hasta ahora nadie ha tenido esos venenosos colmillos en el cuerpo. Los militares biólogos llevan a las serpientes en las aéreas donde no habrá impacto, en las zonas de amortiguación. En la selva está prohibido a los obreros defecar. Tienen sus baños portátiles. Los militares cumplen religiosamente cuidar el entorno y no se comen el pavo de monte, el faisán y el venado 🦌 que cruzan en ese corazón selvático. Una selva negra que mayas como Jacinto Canul conocen bien. Los militares y trabajadores han tomado fotos y juran que en las graficas les salen los aluxes, esos duendes traviesos a quienes Jacinto Canul atribuye que son los que rompen las llantas a los vehículos. Y terminará cuando AMLO pida permiso a la selva con una ofrenda maya.
Y pone los posibles sitios para que AMLO pida los permisos tradicionales, el cruce de la nueva carretera al Aeropuerto con las vías del tren maya o el centro de la pista del Aeropuerto.
*Jacinto pide encuentro con AMLO para la ceremonia y cumplir 25 compromisos como darles 70 placas al federales al ejido para transporte de turistas del Aeropuerto*
*Mayas que vendieron tierras para el aeropuerto esperan que AMLO cumpla acuerdos como darles 70 concesiones de taxi de trasporte turístico*
Por Braulio Poot
En reiteradas ocasiones el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha expresado que los proyectos del Tren Maya y el Aeropuerto Internacional de Tulum “Felipe Carrillo Puerto” serán detonares para el desarrollo económico, social y turístico de la zona sur del estado y sus comunidades, que durante décadas habian permanecido en el olvido.
Sin embargo, la llegada de estas obras representa no solo oportunidad de desarrollo para locales sino también el interés de foráneos, como empresarios y políticos adinerados, en arribar a la zona para aprovechar y explotar los recursos a su favor como lo han hecho en las zonas turísticas desde Tulum hasta Cancún.
Para la mala fortuna de aquellos que buscan monopolizar el proyecto aeroportuario, este se construye en tierras mayas, dónde el sentido de pertenencia de sus habitantes está 100 por ciento arraigado y es complicado sacarlos del camino.
Es así que los ejidatarios, dueños de las tierras, desde un principio establecieron sus condiciones para vender sus patrimonios al Gobierno Federal, con el simple objetivo de no ser relegados en cuanto el proyecto concluya y se cumpla la premisa de López Obrador de beneficiar a los mayas.
El Aeropuerto de Tulum se construye en tierras del municipio de Felipe Carrillo Puerto específicamente en el ejido de Chunyaxché y anexos, el cual es liderado por el comisariado ejidal, Jacinto Canul, maya nativo de 47 años, quién gracias a su capacidad de gestión y negociación logró establecer 25 puntos de acuerdo para vender sus tierras ante el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Jacinto Canul y sus agremiados saben del potencial turístico y la derrama económica que representa tanto el aeropuerto como el Tren Maya, por este motivo no podían dejar ir sus tierras por una módica cantidad de dinero cuando pueden aprovechar todas las oportunidades a largo plazo de desarrollo.
En este sentido y como principal petición, en la minuta, Jacinto Canul solicita al Gobierno Federal que les otorgue, al menos, 70 concesiones de taxi de transporte turístico federal, para que sean ellos quienes brinden este servicio en la zona.
Además para impulsar el desarrollo económico de las comunidades y familias originarias, también piden que se les otorguen concesiones para operar y/o participar en las utilidades que generen las áreas comerciales tanto al interior como al exterior del “Aeropuerto Internacional de Tulum” y de la estación del “Tren Maya”.
Ambos puntos anteriores son de gran relevancia, ya que buscan evitar que las grandes cadenas comerciales y empresarios millonarios se aprovechen del proyecto y sean los únicos beneficiados.
A continuación se enlistan específicamente las 25 condiciones establecidas por el ejido Chunyaxché y anexos ante las autoridades federales:
1.- Se solicita al gobierno federal que accione todas las medidas necesarias para que, durante las negociaciones y, posterior a los pagos correspondientes, se garantice la seguridad, protección y bienestar de los ejidatarios de Chunyaxché y anexos, sus familiares y, en general, de los habitantes de las comunidades anexos que integran el ejido.
2.- Se solicita al Gobierno Federal que promueva una coordinación eficaz entre las distintas dependencias y entidades de la administración pública federal que tengan injerencia en los proyectos (SEDENA, SEDATU, SEMARNAT, SICT, FONATUR, entre otras), las áreas competentes del gobierno estatal de Quintana Roo, el municipio de Felipe Carrillo Puerto y con la participación permanente del ejido, con el objetivo de que se lleve a cabo una planificación exhaustiva y adecuada para que los proyectos aeroportuario y ferroviario, el desarrollo y el crecimiento urbano que se detonará como consecuencia de los mismos, no causen mayores daños al medio ambiente, se evite la especulación inmobiliaria, el crecimiento urbano desordenado y el territorio se desarrolle de forma óptima, priorizando el beneficio real para las personas que habitamos el ejido.
3.- Se solicita al Gobierno Federal que la vía principal de acceso al “Aeropuerto Internacional de Tulum” y a la estación del “Tren Maya” se construya dentro del territorio que comprende el ejido de Chunyaxché y anexos.
4.- Resuelva, en fecha cierta y sin costo para el ejido, lo relativo a la reubicación o modificación, en su caso, de la zona de aprovechamiento forestal maderable previamente otorgado al ejido por SEMARNAT y, que se respeten las dimensiones, volúmenes, especies y condiciones en general.
5.- Implemente un plan de movilidad para que los distintos poblados del ejido comuniquen con el “Aeropuerto Internacional de Tulum” y las estaciones del “Tren Maya”.
6.- Lleve a cabo las acciones necesarias para que se regularice, sin costo para el ejido, la “zona achurada” con una superficie aproximada de 14,000 hectáreas, misma que no forma parte del área natural protegida denominada “Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an”, y que se ubicada en los límites de ésta y de la carretera federal 307.
7.- Considere, tanto la zona desincorporada como aquella en proceso de desincorporación y, se tomen en cuenta las iniciativas propuestas por el ejido, para que las dependencias correspondientes valoren su integración en los instrumentos de planeación urbana.
8.- Una vez concluidos los trámites necesarios, autorice la apertura de vialidades para el proyecto de desarrollo urbano, previamente autorizado al ejido, denominado “Desarrollo Urbanístico Ambiental Muyil”.
9.- Destine recursos y coordine la ampliación de la cobertura de servicios de salud, tales como consultorios, clínicas y hospitales, dentro de las comunidades anexas que integran el ejido.
10.- Invierta recursos en infraestructura eléctrica, hídrica, de comunicaciones y vialidades, para las comunidades anexas que integran el ejido.
11.- Destine recursos para la construcción de vivienda digna en las comunidades del ejido.
12.- Destine recursos para la construcción y equipamiento de escuelas para educación básica y bachillerato dentro de las comunidades anexas que integran el ejido.
13.- Destine recursos para la construcción de un centro universitario dentro del ejido.
14.- Destine recursos para obras de infraestructura en las comunidades en materia de recolección y manejo integral de residuos sólidos, creación de un basurero ejidal, centros de reciclaje y la implementación de contenedores de basura en los poblados del ejido.
15.- Destine recursos para obras de infraestructura en las comunidades como la creación de una planta de tratamiento de aguas residuales para las comunidades del ejido.
16.- Destine recursos para el desarrollo, mejoramiento y mantenimiento de espacios y áreas deportivas dentro de la localidad, así como la construcción de gradas en los campos deportivos.
17.- Permita al ejido aprovechar los recursos maderables que resulten de la tala y desmonte de las áreas que ocuparan los proyectos aeroportuario y ferroviario.
18.- Gestione y autorice bancos de materiales dentro del ejido y, que se le dé prioridad para la compra de materiales para la construcción de los proyectos aeroportuario y ferroviario.
19.- Gestione y otorgue apoyos y/o créditos para que el ejido pueda adquirir maquinaria para la extracción y transformación maderable, así como para la extracción y transformación de materiales pétreos.
20.- Otorguen apoyos integrales para las mejoras, dignificación y mantenimiento de los centros ceremoniales tradicionales de los poblados mayas que integran el ejido.
21.- Implemente estrategias para que el ejido se pueda beneficiar de las zonas económicas y productivas que se detonarán a los alrededores y como consecuencia de los proyectos aeroportuario y ferroviario.
22.- Otorgamiento de concesiones para que los ejidatarios de chunyaxché y anexos puedan operar servicios de transporte turístico federal.
23.- Otorgamiento de concesiones para que los ejidatarios de Chunyaxché y anexos puedan operar y/o participar de las utilidades que generen las áreas comerciales tanto al interior como al exterior del “Aeropuerto Internacional de Tulum” y de la estación del “Tren Maya”.
El líder maya dice que los aluxes dejarán de molestar a los soldados hasta que su jefe AMLO pida permiso a la selva
24.- Prioricen a los ejidatarios y pobladores de las comunidades anexas que integran el ejido, en los proyectos de desarrollo económico, productivo y de infraestructura que se detonarán como consecuencia de los proyectos aeroportuario y ferroviario, de los cuales se enuncian de forma enunciativa y no limitativa, los siguientes: proyectos agroindustriales, ecoturísticos, zonas de aprovechamiento, gasolinerías y concesiones de lanchas dentro de las lagunas colindantes.
25.- Destine recursos y apoyos en proyectos específicos desarrollados por el ejido y comunidades anexas en cuestión de desarrollo económico, ecoturismo y apoyo al campo, tales como: corredor turístico de cenotes y lagunas; creación de un balneario ejidal en lagunas; reactivación de invernaderos; comercialización, distribución y transformación de productos del campo, tales como: pitahaya, miel, chicle, entre otros; comercialización de artesanías, bordados y hamacas.
Los puntos anteriores fueron determinados en conjunto y con la visión de crear una zona digna de locales y turistas que se prevé lleguen a través del aeropuerto y el Tren Maya.
Los beneficios serán de carácter colectivo y no personal, pues el ejido está compuesto por más de 600 ejidatarios, cuyo principal interés es el bienestar de sus familias.