Cancún.- Al menos 7 muertos más dejó una nueva matanza en Cancún, en el Bar la «Kuka» y por lo menos 12 heridos es el saldo preliminar en esta ensangrentada lucha entre carteles del crimen.
Eran aproximadamente las 23.40 horas de la noche del viernes 15 de febrero, cuando comando armado ingresó al bar la Kuka y abrió fuego sobre los comensales para ultimar a 7 personas y herir al menos a otras 12, según el reporte preliminar de esta nueva masacre.
El bar la Kuka está ubicado en la Super Manzana 60 sobre la avenida José López Portillo en pleno centro de la ciudad y en su interior departian varios comensales entre los que se encontraban al parecer miembros de un grupo delictivo dedicado presuntamente al narcomenudeo.
Al parecer los sicarios abrieron fuego contra 19 personas, de las cuales 7 perdieron la vida y otras 12 quedaron heridas por las ráfagas de bala que ahí les alcanzó.
Entre estas personas heridas quedaron comensales y empleados de este bar la Kuka, producto de al menos 20 detonaciones por arma de fuego, según testigos presenciales de los hechos que se encontraban esperando su transporte sobre la avenida López Portillo, en un mar de confusión y pánico que provocaron los disparos.
Otros afirman que vieron a un grupo de al menos cinco hombres armados salir y escapar a pie en diferentes direcciones.
Sin embargo trascendió que los sicarios huyeron a bordo de dos vehículos, entre estos un Jetta gris que se dice, fue detenido por el sindicato de Taxistas ‘Andrés Quintana Roo».
Con esta es la segunda matanza en menos de un mes en Cancún, ya que en la otra fue perpetuada el pasado 20 de enero donde perecieron al menos 5 jóvenes entre ellos estudiantes, también en manos del crimen organizado.
Una matanza más ocurrió en Playa del Carmen en el Bar las Virginias, donde sicarios ultimaron a 7 personas y en cuyo vídeo se observa que si fueron directamente contra algunos miembros de otro grupo delictivo rival.
En esta nueva masacre ocurrida en Cancún, los testigos afirman que muy cerca aún había el móvil normal de gente comprando, ingresando al cajero automático y hasta familias departiendo en la noche de este sangriento viernes, en donde los balazos acabaron con la aparente calma que se vivía durante la noche.
Muchas personas observaron al comando armado ingresar de manera violenta al bar la Kuka para cometer la masacre, que propició pánico y momentos de angustia de la gente de los alrededores y del interior del bar que salió ilesa, pues este centro nocturno se encontraba lleno por ser día de quincena.